Leandro Antonio Alen es condenado a muerte

    0
    773

    Leandro Antonio Alén nació en 1795. Desde joven se suma a la causa federal y en 1827 es nombrado Alférez de Milicia por Manuel Dorrego, cuando este se convierte en Gobernador de Buenos Aires en ese mismo año. En 1829 es destituido de su cargo de Alférez por el recientemente asumido gobernador Juan José Viamonte. Sin embargo, el 8 de diciembre de ese mismo año, Viamonte es remplazado por Juan Manuel de Rosas, que lo nombra Vigilante de Regimientos a Caballo.

    A mediados de la década de 1830 comienza a sufrir algunos problemas psicológicos que lo alejan temporalmente de la policía y lo llevan a dedicarse a su pulpería en Balvanera. En la década de 1840, con el poder de Rosas desgastado y con un tenso clima social, ingresa a la La Mazorca, la fuerza parapolicial de la Sociedad Popular Restauradora, e integra la división policial encabezada por Ciriaco Cuitiño. Hacia finales de esa década vuelve a tener problemas de estabilidad emocional, lo que lo lleva a cometer una serie de incidentes por los cuales es procesado y puesto en prisión. Rosas lo indulta, pero Alén queda definitivamente afuera de la policía. Luego de esto, vuelve a ocuparse de su pulpería.

    En febrero de 1852 se libra la batalla de Caseros, donde Rosas es derrotado por una coalición internacional anti-porteña e inicia su camino al exilio. Justo José de Urquiza entra en Buenos Aires sin ensañarse con los partidarios del régimen depuesto, sino que por el contrario, resaltando su condición de federal y luciendo una cinta rojo punzó.

    En 1852 se suma a las tropas del coronel rosista Hilario Lagos en la campaña para tomar definitivamente la Ciudad de Buenos Aires, en manos de los unitarios.

    Tras la victoria unitaria en 1853, Cuitiño y Alén, al igual que varios integrantes del ejército de Lagos, se presentan a las autoridades porteñas con la certeza de que solo recibirían una pena leve, pero fueron inmediatamente encarcelados y condenados a muerte. Tras permanecer casi 6 meses en prisión, en diciembre de 1853 es trasladado a Plaza de Mayo junto a otros prisioneros para ser ejecutado.

    El cuerpo de Alén es colgado en la horca para las cuatro horas de exposición pública que ordenaba la sentencia judicial. Alen, es el padre de Leandro N. Alem (cambiará la última letra de su apellido) futuro fundador del radicalismo.

    DEJA UNA RESPUESTA

    Por favor ingrese su comentario!
    Por favor ingrese su nombre aquí